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Detta är lycka

Esto es felicidad

Un caballo probablemente es más feliz sin manta. La dicha de revolcarse en paja, virutas, hierba o, ¿por qué no?, en un poco de barro. Pero entonces llegan factores externos que lo complican todo: insectos que revolotean, lluvias torrenciales, nieve arrastrada por el viento o el sol que hace que el pelaje les pique.

Siempre he pensado que mis caballos deberían estar sin manta tanto como sea posible en primavera y verano. Poder rodar sobre la hierba y disfrutar del aire en su pelaje, tal como nosotros disfrutamos del aire en nuestros brazos descubiertos. No hay nada más hermoso que caballos pastando lado a lado en verdes praderas bajo un cielo azul. Un deleite para los ojos y el alma.
Pero claro, está el tema de los insectos. Poder pasear y pastar tranquilamente en el prado durante el verano a veces requiere “ropa”, tanto para el cuerpo como para la cabeza. Porque ese apacible momento de pastoreo puede convertirse rápidamente en un intento de huida de tábanos, moscas, mosquitos y otros bichos. Y luego solo queda esperar que los compañeros de la pradera no les quiten las mantas entre sí cuando el aburrimiento veraniego aparece…

Cuando el verano se acaba y el otoño comienza a llegar, me encanta vestir a mis caballos con mantas limpias y bonitas. Si en primavera me satisface quitarles las mantas, en otoño y invierno disfruto igualmente de volver a colocárselas. No todos los caballos necesitan mantas en el establo, pero los míos están esquilados y entrenan. Por eso, tienen mantas adaptadas a la temperatura que hace en el establo.
Prefiero mantener las puertas y ventanas del establo abiertas el mayor tiempo posible, hasta que las temperaturas bajo cero lo hacen inviable, y opto por colocarles una manta más cálida si es necesario. Quiero ofrecerles esa misma sensación de bienestar que siento cuando me meto bajo una manta cálida y acogedora en una habitación fresca.

Esa sensación de caminar por el pasillo del establo una tarde de noviembre, los caballos masticando su heno, y bajo la luz de las lámparas verlos ahí, parados en sus pijamas. Esto es felicidad.

(Este artículo ha sido traducido con IA. Nos esforzamos por garantizar precisión y claridad, pero algunas sutilezas pueden variar. Gracias por su comprensión.)